(Nueva York, marzo 23 de 2023) La representante permanente de Colombia ante las Naciones Unidas, Leonor Zalabata, participó en el evento “Reducir las desigualdades, aplicar los derechos humanos” organizado por el Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe - FILAC. El objetivo principal del evento fue el de propiciar un espacio de diálogo con representantes de organizaciones indígenas, jóvenes y de la sociedad civil.

En su intervención, la representante resaltó que la primera gran transformación propuesta por el Plan Nacional de Desarrollo es el ordenamiento territorial alrededor del agua y la justicia ambiental, con lo que se busca aumentar la resiliencia a los impactos del cambio climático y a los desastres naturales; garantizar el mínimo vital de agua y el agua como derecho fundamental y bien común; así como democratizar el acceso al agua y fomentar su uso eficiente, responsable y sostenible por parte de todos los sectores de la sociedad y de la economía.

Además, señaló que el mundo sigue rezagado en la implementación de la Agenda 2030 y en el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, incluido el ODS 6 sobre agua y saneamiento, que es transversal y necesario para lograr todos los demás objetivos. La diplomática enfatizó que “sin acceso al agua potable y saneamiento para todos y todas no habrá salud, no habrá seguridad alimentaria, no habrá superación de la pobreza, no habrá diversidad biológica, no habrá, en últimas, vida”.

Por otro lado, la embajadora subrayó que a pesar de que los Pueblos Indígenas conservan el 80% de la biodiversidad del planeta en sus territorios, cuidando las fuentes y cuerpos de agua a través de sus prácticas y saberes ancestrales, son al mismo tiempo una de las poblaciones con mayores necesidades insatisfechas en materia de acceso al agua potable y saneamiento.

En esa línea, resaltó la importancia del enfoque de derechos humanos y la inclusión de toda la sociedad para la consecución del ODS 6, incluyendo a los Pueblos Indígenas como actor fundamental, manifestando que “nosotros hemos conservado el agua, los ríos, los árboles, la biodiversidad; hemos vivido en armonía con la naturaleza, viéndola como un ser vivo, como parte de nuestro ser, no como un recurso a ser explotado”. Por esa razón, concluyó que son los Pueblos indígenas los llamados a impulsar un cambio de mentalidad en el mundo.

La embajadora finalizó su intervención reiterando el compromiso de Colombia como un aliado para defender el agua, promover el desarrollo sostenible, y garantizar que la voz de las organizaciones presentes en el evento sea escuchada.