
Nueva York, 28 de abril de 2022. Misión Permanente de Colombia ante Naciones Unidas en Nueva York conjuntamente con la Embajada en Viena y la Misión ante la Organización de Estados Americanos, a la luz de la calidad de Colombia como Vicepresidente de la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas, celebró el evento virtual “¿Ante los nuevos retos que plantea el Problema Mundial de las Drogas, ¿cómo podemos reforzar el principio de responsabilidad común y compartida?”. Este acontecimiento, que contó con el copatrocinio de los gobiernos de Nigeria y Tailandia, se orientó a promover la reflexión y la revitalización de este principio que ha sido la base de la cooperación internacional en la lucha contra el problema mundial de las drogas.
La actividad fue encabezada por la señora Vicepresidente y Ministra de Relaciones Exteriores, Marta Lucía Ramírez, que en el segmento de instalación estuvo acompañada por el Embajador Ghislain D’Hoop, Representante Permanente del Reino de Bélgica ante las Naciones Unidas en Viena y Presidente de la Comisión de Estupefacientes; por la Sra. Ghada Waly, Directora Ejecutiva de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC por sus siglas en inglés); y por a Sra. Jagjit Pavadia, Presidente de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes -JIFE-.
En su intervención, la Vicepresidente destacó el compromiso de Colombia con sus obligaciones internacionales en materia de lucha antidrogas, a la vez que señaló que el principio de la responsabilidad común y compartida es la piedra angular del régimen jurídico internacional en la materia. En ese sentido, insistió sobre el punto de que este principio sirve de guía para las acciones individuales y conjuntas de todos los Estados y garantiza su compromiso igualitario en la lucha contra todas las dimensiones del Problema Mundial de las Drogas.
Los invitados señalaron la necesidad de enfrentar la lucha contra el Problema Mundial de las Drogas en los escenarios internacionales sobre la base de los lineamientos que proponen documentos como la Declaración Política de la Asamblea General Especializada de las Naciones Unidas de 2016 y la Declaración Ministerial de la Comisión de Estupefacientes de 2019, con la finalidad de enfocar los esfuerzos de la comunidad internacional de manera decidida hacia propósitos claros. El desarrollo de mecanismos de medición de la cooperación adecuados deviene en una necesidad fundamental para poder garantizar mejores niveles de cooperación.
La actividad incluyó el desarrollo de un panel interactivo moderado por el Sr. Pierre Lapaque, Director Regional para América Latina y el Caribe de la UNODC y que contó con la participación de cuatro distinguidos panelistas: el Sr. Shadrach Haruna , Secretario de la Agencia Nacional para el Control de las Drogas de Nigeria; el Embajador Adam Namm , Secretario Ejecutivo de la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas -CICAD-; el Profesor Roberto Canay, Codirector del Capítulo de Argentina de la Red Internacional de Adicciones; y la ya mencionada Sra. Jagjit Pavadia.
A manera de conclusión, los expertos resaltaron la necesidad de tomar acciones decididas en los campos de reducción de la oferta y de la demanda de drogas, de manera equilibrada por efecto de su profunda interrelación. La existencia de desbalances entre los limitados recursos existentes para la reducción de la demanda de drogas, frente a la robusta institucionalidad que existe para enfrentar la oferta de narcóticos impone profundos retos para lograr soluciones equilibradas en esta materia.
En el panel interactivo, los panelistas compartieron sus impresiones sobre los retos que enfrenta la comunidad internacional para reafirmar la aplicación del principio de responsabilidad común y compartida y los mecanismos novedosos para fomentar una mejor aplicación de este principio en la lucha contra el Problema Mundial de las Drogas.
En el cierre del evento, el Embajador Guillermo Fernández de Soto, Representante Permanente de Colombia ante las Naciones Unidas en Nueva York, se refirió a la persistencia del Problema Mundial de las Drogas en el mundo que requiere la respuesta conjunta, coordinada y multilateral de la comunidad internacional, sobre la base del principio de la responsabilidad común y compartida.