
Dubrovnik y Nueva York (sep. 11/15). En el marco de la Primera Conferencia de Examen de la Convención sobre la prohibición de Municiones en Racimo, celebrada en Dubrovnik, Croacia, del 7 al 11 de septiembre, Colombia se unió al grupo de 96 países que han ratificado la Convención sobre la Prohibición de Municiones en Racimo.
Conforme al anuncio realizado ante esa Conferencia por el General Oscar Naranjo Trujillo, Jefe de la Delegación que representó a Colombia en el evento, el instrumento de ratificación de esta importante Convención fue depositado el 10 de septiembre ante la Organización de Naciones Unidas en Nueva York, por parte de la Representante Permanente de Colombia ante ese organismo en Nueva York, Embajadora María Emma Mejía.
El anuncio realizado en Dubrovnik el 8 de septiembre por el Jefe de Delegación de Colombia, General Oscar Naranjo, Ministro Consejero para el Post Conflicto, Derechos Humanos y Seguridad fue recibido con una aclamación general por parte de los delegados de los más de 100 países asistentes a la reunión, representantes de la sociedad civil y la academia.
El General Naranjo recalcó la relevancia de esta Convención que, junto con otros instrumentos Internacionales, contribuirán a la consolidación del Proceso de Paz actualmente en curso. Reconoció, así mismo, que la aplicación de algunas de las disposiciones de la misma plantea retos y no será una tarea sencilla, por lo cual hizo un llamado a la comunidad internacional para que por intermedio de la asistencia técnica y la cooperación se pueda dar cumplimiento a dichas obligaciones.
Desde el año 2009 las Fuerzas Armadas de Colombia destruyeron la totalidad de arsenales que poseía de este tipo de municiones con el fin de promover la protección y salvaguarda de la población civil de los efectos indiscriminados de las mismas.
Por su parte la Representante Permanente de Colombia ante las Naciones Unidas en Nueva York, Embajadora María Emma Mejía destacó que el depósito del instrumento de ratificación reafirma el compromiso de Colombia con el desarme, la no proliferación, el control de armamentos y el cumplimiento del régimen de derechos humanos y derecho internacional humanitario.