Nueva York, (marzo 21 de 2023). La Representante Permanente de Colombia ante Naciones Unidas, Leonor Zalabata, participó en el evento de conmemoración del Día Internacional de los Bosques, el cual se conmemora oficialmente el 21 de marzo. El tema prioritario de esta sesión fue “Bosques saludables: personas saludables”, este enfoque busca hacer un llamado para crear conciencia sobre la importancia de cuidar los bosques bajo la premisa de que solo a través de unos bosques sanos es posible tener poblaciones sanas.

La Representante Permanente comenzó su intervención señalando que Colombia es el segundo país más biodiverso del mundo, que es un país pluriétnico y multicultural, y haciendo énfasis en que el 52% de su territorio está cubierto por bosques, los cuales son esenciales para la regulación del clima y la conservación de la vida en general. Además, prendió las alarmas sobre el peligroso punto de no retorno al que está acercándose el Amazonas, afirmando que de alcanzarse dicho punto se estarían generando impactos locales y globales difíciles de dimensionar.

Por otro lado, la Embajadora se refirió a los esfuerzos del Gobierno Nacional por mitigar los efectos del cambio climático y afirmó que el país está avanzando en la implementación del Plan Nacional de Contención de la Deforestación, cuyo objetivo es la transformación de núcleos de deforestación en núcleos de desarrollo forestal, mediante acuerdos sociales y de concertación con las comunidades. Así mismo, mencionó que se destinarán 200 millones de dólares anuales por 20 años para la protección de los bosques, incluyendo el Amazonas y el Chocó biogeográfico.

Además, hizo un llamado a la comunidad internacional para que se comprometa con la protección efectiva de los bosques, mencionando cuatro necesidades concretas: I. la generación de oportunidades de desarrollo sostenible para las comunidades, incluyendo la economía forestal y los bioproductos. II. la promoción de modelos sostenibles de consumo y producción. III. un compromiso real con la mitigación de gases de efecto invernadero por parte de los mayores emisores. IV. la movilización de financiamiento adecuado para que los países en desarrollo puedan frenar la deforestación y conservar sus bosques, sin poner en riesgo su soberanía alimentaria, su desarrollo económico y social y el de sus poblaciones.

También resaltó la importancia de los Pueblos Indígenas, señalando que conservan el 80% de la biodiversidad global en sus territorios, y afirmando que “los Pueblos Indígenas no vemos al agua, los árboles ni la tierra como recursos, sino como seres vivos cuya vitalidad es esencial preservar”. En esta misma línea realizó una invitación a hacer de la crisis planetaria una oportunidad para cambiar la mentalidad, las interacciones con la madre tierra y la forma en la que se valoran la vida y la naturaleza.

Finalmente, la Embajadora Zalabata reiteró el compromiso de Colombia con la protección de sus bosques y de su biodiversidad y con la lucha contra el cambio climático, como un asunto de justicia social, ambiental e intergeneracional.