
La reunión se llevó a cabo el 7 de septiembre en Nueva York. Fue inaugurada por el Presidente de la Asamblea General de Naciones Unidas y la Subsecretaria General y Alta Comisionada para Asuntos de Desarme. Contó con la participación del Secretario Ejecutivo de la Comisión Preparatoria del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares -TPCEN-, de la Representante del Organismo Internacional de Energía Atómica -OIEA-, y del Director de la Iniciativa Internacional Marshallese.
Representantes de grupos regionales y de concertación política, y algunos Estados en su capacidad nacional, se pronunciaron en la sesión resaltando la importancia de la prohibición completa de los ensayos nucleares y el logro del objetivo de un mundo libre de armas nucleares. Hicieron un llamado a la pronta entrada en vigor del TPCEN y al logro de avances en materia de desarme nuclear.
En la reunión Colombia encomendó el papel fundamental que ha jugado la sociedad civil en su conjunto en visibilizar, educar, y concientizar sobre las catastróficas, dolorosas y prolongadas consecuencias humanitarias de cualquier explosión nuclear. Recordando testimonios de sobrevivientes y sus familias, y de los promotores de una mayor conciencia al respecto, reiteró que el ser humano y su dignidad deben estar en el centro de todas nuestras empresas, individuales y colectivas, y que nuestra responsabilidad primordial es preservar la vida.
Así mismo, hizo un llamado a la universalización de la prohibición completa de los ensayos nucleares, la proscripción de las armas nucleares, y la eliminación de los arsenales existentes.
En el 2009 la Asamblea General declaró el 29 de agosto como Día Internacional contra los Ensayos Nucleares, dedicado a aumentar la conciencia y los conocimientos del público sobre los efectos de las explosiones de los ensayos de armas nucleares y cualquier otro tipo de explosión nuclear, y sobre la necesidad de ponerles fin, como uno de los medios de lograr el objetivo de un mundo libre de armas nucleares.
La Asamblea reitera todos los años la invitación a los Estados, al sistema de Naciones Unidas y a la sociedad civil en su conjunto a celebrar ese Día de manera adecuada, entre otras cosas por medio de todo tipo de actividades educativas y de concienciación.